El equipo anfitrión, Rusia, abrió la Copa del Mundo con una demostración de autoridad, derrotando a Arabia Saudita, que sólo tuvo el control durante una parte del partido, por 3-0.
El primer gol del partido lo marcó de cabeza en el minuto 12. lirio La aparición de Gazinski aceleró la emoción del país anfitrión, que acoge por primera vez un Mundial.
El signo del segundo gol es Dennis Cheryshev mostró genialidad dentro del área y atormentó a dos defensores del equipo petrolero.
En la segunda parte marcó su tercer gol de cabeza en el minuto 71, pero esta vez artem Juba, y no hizo más que confirmar el pobre combate aéreo de la zona baja de los árabes.
Para el cuarto gol, Cheryshev apareció de nuevo y anotó un tiro de tres dedos de alto nivel hacia la portería saudí.
Pero no todo terminó ahí. Esto se debe a que cuando llegue el momento de un cambio, habrá aún más presión. Alejandro Golovin anotó con maestría un tiro libre para Telstar, cerrando el partido 5-0.