El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, ha prometido que la frontera de Rafah entre Egipto y la Franja de Gaza estará «abierta» para facilitar la llegada de ayuda humanitaria a los palestinos atrapados en el enclave.
«Rafah se abrirá», dijo Blinken en una declaración a los periodistas que lo acompañaban después de reunirse con el presidente egipcio Abdel Fattah al-Sisi en El Cairo.
La guerra de nueve días dejó más de 2.670 muertos en la Franja, la más mortífera de la historia del enclave, superando ya al conflicto de 2014 que duró 55 días, con un total de 9.600 heridos.
«Estamos trabajando con las Naciones Unidas, Egipto, Israel y otros para establecer mecanismos para llevar ayuda a los necesitados», dijo el jefe de asuntos exteriores de Estados Unidos en una declaración publicada más tarde por el Departamento de Estado.
Horas más tarde, la cadena estadounidense NBC informó, citando a funcionarios palestinos, que la frontera de Rafah se abriría a las 9 a.m. hora local del lunes, permitiendo la entrada de ayuda humanitaria.
Estados Unidos alcanzó ayer sábado un acuerdo con Egipto, Israel y Qatar que permitirá a cientos de extranjeros y palestinos con pasaportes de otros países, incluidos estadounidenses y europeos, salir de la Franja de Gaza por el cruce de Rafah.
Sin embargo, después de que se filtrara el acuerdo, las autoridades egipcias anunciaron que no permitirían la entrada de extranjeros en la Franja de Gaza a menos que primero se facilitara ayuda para los 2,2 millones de personas que se encuentran hacinadas allí.
La ayuda humanitaria, incluidos suministros médicos para hospitales de Gaza, está actualmente esperando para cruzar desde Egipto a través del cruce de Rafah, la única salida al enclave palestino, que no está bajo control israelí y conecta con la península egipcia del Sinaí.
